El plato de habas cortijeras es originario de Andalucía, una región del sur de España. Se trata de un plato tradicional que se ha consumido durante generaciones en las zonas rurales de la región. En particular, este plato es muy popular en la provincia de Huelva y en la Sierra de Cádiz.
Las recetas con habas representan alimentos saludables y nutritivos, debido a su composición nutricional. Contienen proteínas de alta calidad, fibra dietética, vitaminas del complejo B, ácido fólico, vitamina C, vitamina K y minerales como hierro, magnesio y zinc.
Además, las habas son ricas en antioxidantes como la quercetina, la kaempferol y el ácido clorogénico, que ayudan a proteger al cuerpo contra los radicales libres y reducir el riesgo de enfermedades crónicas como enfermedades del corazón y algunos tipos de cáncer.
También se ha demostrado que las habas tienen efectos beneficiosos en la salud digestiva, reduciendo el estreñimiento y mejorando la salud intestinal. En general, incluir habas en la dieta puede ser una buena forma de obtener nutrientes esenciales y mejorar la salud en general.
Para 4 personas
Calorías: 336 kcal
INGREDIENTES
1 ½ rebanadas de pan
1 kg de habas
100 g de chorizo
100 g de morcilla
2 dientes de ajo
½ cebolla
1 tomates
Laurel
Azafrán
Comino molido
Hierbabuena
2 huevos
1 patata mediana
Aceite de oliva virgen extra
Sal y pimienta
PREPARACIÓN
Fríe en una cacerola, con una cantidad generosa de aceite de oliva virgen extra, las rebanadas de pan. Aparta y reserva.
En el mismo aceite, sofreír la cebolla picada, los dientes de ajo fileteados y el chorizo troceado en pequeños dados. Cuando la verdura esté bien sofrita, añadir los tomates pelados y picados y 1 hoja de laurel. Dejar cocinar unos minutos e incorporar las habas desgranadas. Cubrir con agua, introducir la porción entera de morcilla y dejar cocinar a fuego medio durante unos 15 minutos.
Disponer en una jarra un buen pellizco de sal, pimienta, unas hebras de azafrán, 1/2 cucharilla de comino molido, unas hojas de hierbabuena y las rebanadas de pan frito. Triturar bien, ayudándonos de caldo de la cocción, y volcar el majado sobre la cacerola para que continúe cocinándose.
Para la guarnición, pelar la patata y rallarla por las cuchillas más grandes del rallador. Enjuagar con agua y escurrir muy bien. Mientras se escurren, empezar a freír los huevos en una sartén con aceite.
En el mismo aceite, freír las patatas ralladas hasta que doren. Apartar sobre papel de cocina y salpimentar.
Sacar la morcilla, trocearla y devolver las porciones a la cazuela o servir directamente en los platos. Acompañar la cazuela de habas con las patatas ralladas y los huevos fritos.
¿Sirven las habas cortijeras como plato principal?
Las habas cortijeras se pueden servir como plato único ya que son muy completas y nutritivas, pero también se pueden acompañar con otros platos o ingredientes para crear un menú más completo. Algunas opciones de acompañamiento pueden incluir:
Ensalada: una ensalada fresca y crujiente puede ser el complemento perfecto para las habas cortijeras. Por ejemplo, una ensalada de tomate, cebolla y pepino con una vinagreta de aceite de oliva y limón.
Pan: el pan recién horneado es un acompañamiento clásico para las habas cortijeras. Se puede servir una barra de pan rústico o tostadas con ajo y aceite de oliva.
Vino tinto: las habas cortijeras suelen cocinarse con vino blanco, pero también pueden acompañarse con un buen vino tinto de la región.
Queso: un trozo de queso curado o semicurado puede complementar las habas cortijeras muy bien. Por ejemplo, queso manchego o queso de cabra.
Carne: si se desea añadir una proteína adicional al plato, se pueden servir las habas cortijeras con carne de cerdo o cordero asada.