Descubre los tipos de cereales más saludables

Los cereales no solo se han ganado nuestros corazones durante mucho tiempo, sino que forman una parte esencial de una dieta equilibrada. No es de extrañar, puede usarlos para crear muchos platos diferentes, tanto típicos para el almuerzo como para el postre, dulces. El trigo, el maíz y el arroz son los más consumidos a lo largo del mundo pero, ¿sabes cuales son otras alternativas de cereales más saludables? Lo más importante es que muchos tipos de cereales tienen un efecto positivo en la salud humana, al mismo tiempo que son una excelente fuente de carbohidratos y proteínas.

¿Por qué vale la pena comer cereales?

Hay varias razones muy importantes por las que debe elegir cereales. Aportan a nuestro organismo muchos ingredientes valiosos, como las vitaminas B, así como una gran cantidad de minerales, como el zinc, el magnesio y el potasio. La mayoría de los cereales tienen un índice glucémico alto. Mientras tanto, los cereales más saludables que mencionamos aquí cuentan con un índice glucémico medio, gracias a lo cual el nivel de glucosa en sangre aumenta muy lentamente tras su consumo, lo que es muy bueno para nuestra salud.

Algunos tipos también son libres de gluten, por lo que las personas que padecen la enfermedad celíaca pueden comerlos fácilmente.

Nuevos cereales más saludables recomendados

La sémola es un grano de trigo muy fino. A diferencia de otros cereales, contiene pocas vitaminas y minerales. Por ejemplo, 100 gramos de sémola de trigo contienen:

1,23 mg de hierro,
12,68 g de proteínas,
17 mg de calcio,
7,20 g de fibra,
186 mg de potasio,
1,05 mg de zinc,
47 mg de magnesio y
0,28 mg de vitamina B1

Pero se caracteriza por un contenido muy alto de yodo (100 gramos de sémola contienen 5,10 mg de yodo). El yodo es un mineral esencial que ayuda a mantener la función tiroidea normal.

La sémola se recomienda para personas que tienen problemas con la vejiga y los conductos biliares, así como para enfermedades del hígado, páncreas, riñones y tracto urinario. Sin embargo, es importante tener en cuenta que la sémola de trigo no es un tratamiento médico para estas enfermedades, sino que puede ser un complemento dietético saludable. Es recomendable consultar a un profesional de la salud para obtener información más precisa y personalizada.

Trigo sarraceno

También llamado alforfón, es considerado por muchos como el rey de los cereales. Entre los cereales más saludables, se trata de un pseudocereal. Es una buena fuente de proteínas y contiene los 9 aminoácidos esenciales, incluyendo la lisina y el triptófano, que nuestro cuerpo no puede producir por sí solo. Además, contiene grandes cantidades de magnesio, zinc, manganeso, potasio y fósforo. El alforfón o trigo sarraceno es rico en vitaminas del grupo B, como la vitamina B1, B2, B3, B6 y ácido fólico o B9.

Debido al hecho de que no contiene gluten, el alforfón es una buena opción para las personas que siguen una dieta sin gluten, ya que no contiene esta proteína. Además, el alforfón es rico en proteínas, fibra, hierro y minerales como el magnesio, el fósforo y el potasio.

También se recomienda comerlo en el caso de problemas con los intestinos y el sistema circulatorio, especialmente con hipertensión, porque los granos de trigo sarraceno son muy buenos para bajar la presión arterial.

acercamiento del trigo sarraceno
Fuente: Eva Bronzini en Pexels

Mijo

Sémola  de mijo, especialmente popular entre los veganos. Es el cereal más antiguo que se conoce y contiene muchas vitaminas B, así como hierro y cobre. Como el trigo sarraceno, no contiene gluten. El mijo tiene propiedades antivirales y alivia la inflamación. También vale la pena consumirlo para fortalecer la inmunidad, así como ante los primeros signos de resfriado y gripe. Es muy delicado y no causa alergias, por lo que las personas alérgicas también pueden beneficiarse de sus propiedades beneficiosas.

Amaranto

Nativo de Centroamérica, el amaranto se ha consumido como un cereal esencial desde tiempos precolombinos. Se da en climas templados y tropicales en México, habiendo hasta 800 especies diversas entre sí.

Aunque es un producto que pertenece a la denominada superalimentos. Contiene muchas proteínas y hierro de fácil digestión, en concreto, por cada 100 gramos de amaranto se obtienen 14 gramos proteínas vegetales y 7,6 miligramos de hierro. Además, no contiene gluten. En la actualidad se utiliza principalmente para enriquecer harinas, concentrados, aceites, almidones y colorantes.

acercamiento de las semillas de amaranto
Fuente: Eva Bronzini en Pexels

Sémola de maíz

Se obtiene a partir de granos de maíz triturados. A diferencia de otros tipos de cereales, contiene una gran cantidad de grasas y vitamina E valiosas.

La sémola de maíz se usa con mucha frecuencia para alimentar a los bebés, ya que, a diferencia de la popular harina de trigo, no causa alergias. Los pacientes con hiperlipidemia, hipercolesterolemia y aterosclerosis se beneficiarán principalmente de las propiedades beneficiosas del maíz. Pues la sémola de maíz es una fuente rica de fibra dietética, que puede ayudar a reducir los niveles de colesterol LDL (malo) y aumentar los niveles de colesterol HDL (bueno). También es una buena fuente de antioxidantes, que pueden ayudar a proteger las arterias del daño.

La cantidad de tipos de cereales que se pueden encontrar en las tiendas es enorme, además de lo mencionado anteriormente, también vale la pena prestar atención al bulgur, el cuscús y la quinoa, que también contienen una gran cantidad de nutrientes valiosos.